jueves, 7 de agosto de 2014

Resumen de los meses de mayo, junio y julio en el Pirineo occidental

Hace ya varias semanas que no actualizo el blog, y con el fin de no abandonarlo vuelvo ha actualizarlo para hacer un resumen muy breve y conciso de lo que ha sucedido meteorológicamente hablando en el Pirineo occidental en estos últimos meses. Y de paso me haré la promesa a mi mismo de no tenerlo tanto tiempo "olvidado", ya que creo que la última vez que escribí en él fue por el mes de abril...mucho ha llovido y nevado desde entonces...

Conviene antes recordar como fue el mes de abril en el conjunto del Pirineo occidental: seco y muy cálido, aunque sin llegar a los valores records que se alcanzaron en abril del 2011, que fue el mes de abril más cálido en muchos años.

Pese a las altas temperaturas de abril se llegó al mes de mayo con una buena innivación en el Pirineo occidental en cotas medias/altas, claramente por encima de la media. Algo lógico si tenemos en cuenta que la mayoría de frentes y lluvias/nevadas del invierno han llegado siempre desde el oeste, precipitando más en el Pirineo occidental que en el central/oriental. Invierno muy Atlántico, húmedo y muy suave, sin prácticamente irrupciones de aire frío de entidad.

Comenzaba así el mes de mayo con una innivación más que buena a partir de los 2200 m. En el macizo de Larra la innivación era sobresaliente a principios del mes, con nieve continua a partir de tan sólo 1700 m.

Comienzo de mes con patrón de norte entre el día 1 y el día 4, con temperaturas muy frescas y rehielos nocturnos bastante buenos. Las precipitaciones fueron muy escasas, y siempre restringidas a zonas abiertas al norte.

Temperatura a 850 hpa el 2 de mayo del 2014. Clara situación de norte en toda la cordillera pirenaica dándose algunas nevadas débiles en vertiente norte.



Entre el 5 y el 10 de mayo la situación fue estable con precipitaciones escasas y temperaturas máximas cálidas, ligeramente por encima de la media, con importantes amplitudes térmicas en los valles registrándose máximas de hasta 20ºC y mínimas cercanas a los 0ºC. Pese a la suavidad de las temperaturas el rehielo nocturno fue aceptable en cotas altas. Durante este periodo la temperatura a 850 hpa osciló entre los 8/12ºC y a 700 hpa entre 1/3ºC.

Después de este corto episodio de temperaturas cálidas volvió el patrón de norte el día 11 de mayo, extendiéndose hasta el 17 de mayo. Día de temperaturas máximas frescas con eficientes rehielos nocturnos a partir de 2000 m. La temperatura a 850 hpa en este periodo osciló entre los 3/7ºC, incluso en alguna jornada llegó a bajar hasta los 0ºC con nevadas a tan sólo 1300 m en la vertiente norte.

El 13 de mayo fue una jornada fría en los Pirineos, con algunas nevadas débiles en vertiente norte a tan sólo 1200/1300 m de altitud. Temperatura a 850 hpa de ese día:



Fue a partir del día 18 cuando empezó el movimiento atmosférico y la diversión para todo buen aficionado meteorológico que se aprecie. Desde ese día, hasta finales de mes, la inestabilidad fue constante dándose importantes precipitaciones y buenas nevadas a partir de 2400 m de altitud. Era ya la última nevada importante de la temporada en los Pirineos. Dicha nevada fue muy beneficiosa para los glaciares y heleros, con más de 1 metro de nieve nueva. Una nieve húmeda y pesada ya que llegó principalmente con vientos de suroeste.

Estos mapas reflejan a la perfección la inestabilidad que se dio a finales de mayo:

Situación sinóptica el 21 de mayo. Borrasca con su centro situado al norte de Asturias, bombeando viento de suroeste a los Pirineos:




Situación también muy inestable el 23 de mayo, esta vez con el centro de la borrasca situado en las Islas Británicas:



Resumiendo, el mes de mayo tuvo dos partes bien diferenciadas: una primera quincena bastante estable con temperaturas normales para la época del año, y una segunda quincena de acusada inestabilidad con abundantes precipitaciones, especialmente en la vertiente sur, ya que el viento de suroeste fue predominante. Durante esta segunda quincena del mes las temperaturas fueran ligeramente más bajas de lo normal, especialmente las máximas debido a la escasa insolación. El mes acabo con unos registros de precipitación ligeramente superiores a la media en la zona occidental y unas temperaturas claramente por debajo de la media. Se entraba al verano meteorológico con una innivación en cotas altas muy buena.







Paso ahora a resumir el primer mes del verano meteorológico, es decir junio, y al igual que con el mes de mayo lo haré forma concisa.

El mes comenzó con patrón de norte, curiosamente igual que el mes de mayo. Dicho patrón de norte se prolongó desde el día 1 hasta el día 4. Durante estos días las máximas fueron frescas para la época del año, con una temperatura a 850 hpa de 7/9ºC.

Primer día del mes bastante fresco en el Pirineo occidental. Temperatura a 850 hpa ese día:



Entre los días 5 y 13 del mes las temperaturas fueron calurosas, con temperaturas máximas de pleno verano. Las máximas llegaron a superar los 22ºC a 1500 m de altitud. Valores elevados, pero no se trato ni mucho menos de una ola de calor. Temperatura a 850 hpa de 13/17ºC durante este periodo.

El día 14 volvió el patrón de norte, manteniendo la temperatura a 850 hpa por debajo de los 12ºC hasta el 20 de junio. Durante estos días las máximas fueron muy frescas, del orden de 12/17ºC a 1500 m de altitud.

El día 20 las temperaturas se recuperaron de forma notable subiendo la temperatura a 850 hpa hasta los 18ºC, fue uno de los días más calurosos del mes en muchos puntos del Pirineo occidental, con máximas cercanas a los 25ºC a 1500 m. El calor se prolongó hasta el día 24, día en el que volvió el flujo norteño.

Temperatura a 850 hpa el 20 de junio, uno de los días más calurosos del mes en el sector occidental de los Pirineos:



Desde el día 24 hasta final de mes las temperaturas fueron más bien suaves, con máximas de 13/18ºC a 1500 m de altitud. Calor muy soportable.

Mes por lo tanto con valores térmicos ligeramente por encima de la media, con precipitaciones normales e irregulares, algo típico de este mes, ya que la mayor parte de las precipitaciones se dan por fenómenos tormentosos, los cuales suelen ser muy caprichosos.







Para acabar voy a resumir de forma muy breve este pasado mes de julio.

Entre el día 1 y 6 de este mes las temperaturas fueron normales para la época del año, con un calor suave en los Pirineos y precipitaciones abundantes debido a intensas tormentas. La temperatura a 850 hpa osciló en este periodo entre los 11/16ºC mientras que a 700 hpa entre 2/4ºC.

Entre el día 7 y el 14 se dio una situación de norte que mantuvo las temperaturas muy frescas, especialmente en la vertiente francesa, con máximas algunos días inferiores a los 12ºC a 1500 m de altitud, e incluso por debajo de los 10ºC en la zona de Larra debido a la presencia persistente de la niebla norteña. Buen rehielo nocturno en cotas altas, durante estos días fue obligatorio el uso de crampones y piolet para cruzar neveros totalmente helados.

Temperatura a 850 hpa el 7 de julio, día más propio de octubre que de julio...



A partir del día 15 de julio empezó un episodio de altas temperaturas que se prolongó hasta el 18 de julio. Episodio corto pero intenso, con máximas que llegaron hasta los 27ºC a 1500 m de altitud.

Temperatura a 850 hpa el día 18 de julio de 24/25ºC...fue el día más caluroso del mes:



El resto del mes ha sido cálido, sin calores excesivos y con algunas tormentas intensas. La temperatura a 850 hpa desde el día 19 hasta el final del mes ha oscilado entre los 9/15ºC. Valores por lo tanto totalmente normales para un mes de julio, sin darse ninguna ola de calor, evitando con ello una fuerte fusión del manto de nieve que cubre los glaciares y heleros.

Por lo tanto mes de julio más bien fresco, con temperaturas ligeramente por debajo de la media. Una buena noticia para los glaciares pirenaicos, que han entrado en el mes de agosto con un aspecto bastante bueno, con aún bastante nieve tapando el hielo glaciar. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario